Oporto, es la cuna de Portugal. En realidad a ambos lados del Douro descansan dos ciudades, Porto y Gaia, de donde viene la denominación de Portugal. Porto es la ciudad burguesa y clerical, con muchas cuidades en una (la de pescadores, la de clérigos, la de artistas, la de burócratas, la de aristócratas de abolengo portugués, la de burgueses enriquecidos por el comercio. etc, y Vila Nova de Gaia la del vino, la de las bodegas, la colonial la de los señores ingleses y los trabajadores portugueses, emigrantes del interior... márgen derecho y márgen izquierda... norte y sur la historia de siempre...
Oporto es una de las ciudades (si no la que más) con más encanto del mundo; abierta al atlántico y final de camino de un río que cruza Castilla completamente. Una ciudad silenciosa, húmeda, armónica en sus edificaciones y con grandes espacios... no es una ciudad cutre y especulativa como las que tenemos aguas arriba del Douro, por aquellos parajes Duero.
En Oporto hay que comer bacalahu, polvo (pulpo, lo más parecido al chopito... manjar aún desconocido en la cocina porteña... pero que ante gentes tan amables y sitios tan bonitos, solo cabe disculpar esta omisión... y llevarla con dignidad), arroz con marisco, queijo de cabra, olivas, tarta de almendra y regarla con un vinho de porto, dulce tawny, ruby o si el bolsillo accede, Vintage o Last Vintage Bottle...
Y contemplar, desde las Cais de Gaia las Cais de Ribera, y viceversa... y cruzar el puente y volverlo a cruzar... y subir y bajar por sus calles... y buscar rincones para tomar cahipirinha...
Y subirse en un barco y pasar por debajo de sus cinco puentes, visitar en tranvía el Castillo del Quijo, ver la moderna medusa de Matosinhos y tomarse una servesita mirando la mar océana... y cómo no... esencial: visitar la Fundación Serralves y perderse por los olores de sus jardines... y recrearse con el arte moderno... tan moderno que en ocasiones aún ni está la exposición colocada, y en su lago no preguntarse, dónde habrá chopitos... porque no los hay... doy fe... pero por casi única vez... los echas tan poco de menos!!Oporto... para mi... la ciudad más bella del mundo... y qué cerca!!
Saludos chopiteros!
2 comentarios:
Yo, en cambio, siempre fui mas de Lisboa. El Portugal del norte, está bem. Pero entrar por Extremadura, cruzar el Alentejo y terminar en Lisboa, es mi viaje.
Milenta veces lo he hecho, y milenta veces más espero hacerlo. Por carretera, por imaginación, por recuerdos.
Porto tiene mucho, a ambos lados del douro... pero a mi búscame en la desembocadura del Tajo, en las cuestas del barrio de Belem montado en un tranvía, leyendo “el banquero anarquista” de Pessoa en una terraza, comprando tabaco en una tienda vieja y sucia en los bajos de los edificios de Pombal, y, como no, cantando Grándola Vilamorena, a la sombra de una azinheira... y buscando, sin nostalgia, calles empedradas donde mis ojos infantiles vieron en un telediario español, claveles en fusiles, allá por abril de 1974...
Abril, en Lisboa, es más Abril que en ninguna parte. Que me perdonen los sevillanos. Son perspectivas distintas. Sólo eso.
... pero en ambas, Lisboa y Oporto, sigue existiendo pobreza y niños descalzos mendigando. Y eso, por desgracia, anula toda saudade, todo fado, toda tristeza estructural pessoana... ante esto, la carencia de chopitos es un mal menor, infinitesimal... como una sardinha en el atlántico o perdida en la red de un pescador de Setúbal...
duralex,
No esperaba menos!!!
"yo, en cambio, siempre fui más de Lisboa"... si ya me extrañaba a mi... que pudieras coincidir... o incluso no coincidiendo callarlo!! jasjajajaa
Saludos chopiteros!
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